Recientemente, MundoMaritimo informó sobre los gravámenes propuestos por La Oficina del Representante de Comercio de EE. UU. (USTR, por sus siglas en inglés) a los buques construidos en China que recalen en puertos estadounidenses, con el fin de contrarrestar el dominio de la industria marítima china a la que acusa de beneficiarse de subsidios estatales (dumping) y al trato preferencial a empresas públicas, desfavoreciendo a competidores privados internacionales. Pero queda por saber la magnitud del impacto de las medidas propuestas y sus posibles consecuencias.
Seguir leyendo