El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó un nuevo desembolso de USD 600 millones para Ecuador, como parte del programa de crédito de Servicio Ampliado (SAF). Esta decisión refleja la confianza internacional en la estabilidad económica y fiscal del país.
El organismo multilateral destacó los avances del Gobierno ecuatoriano en materia de reformas estructurales, gobernanza y crecimiento sostenible, resaltando la recuperación impulsada por las exportaciones no petroleras, la baja inflación y el fortalecimiento del sistema productivo nacional.
Este respaldo financiero permitirá al país consolidar su posición económica, mantener una deuda pública en tendencia descendente y seguir impulsando el comercio exterior mediante puertos modernos, infraestructura eficiente y relaciones internacionales sólidas, que fortalezcan la competitividad ecuatoriana en los mercados globales.
Fuente: Primicias
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