
COSCO Shipping Group ha aumentado significativamente el uso de sistemas de limpieza de gases de escape (scrubbers) en los últimos doce meses. Según la revisión anual de Alphaliner sobre esta materia, COSCO fue el que más influyó durante el año, añadiendo 417.827 TEUs de capacidad equipada con scrubbers en 2024. Esto hace que el grupo suba del octavo al quinto puesto en el ranking de operadores de acuerdo con la cantidad de depuradores por capacidad.
COSCO había sido anteriormente un bajo consumidor de esta tecnología, con solo alrededor del 10% de su flota equipada hace dos años, que ahora ha aumentado al 30%. Este año, la línea naviera china instaló scrubbers en dieciséis nuevos buques con propulsión convencional entregados en 2024, incluidos seis Megamax.
Mientras tanto, se entregarán al grupo naviero chino 300.000 TEUs adicionales de capacidad equipada con depuradores entre 2025 y 2028, incluida la serie de diez Maxi-Neopanamax «flower» de 16.828 TEUs de OOCL y la serie de seis buques COSCO de 13.600 TEUs a entregar en 2027.
Scrubbers en la flota global
El número total de buques equipados con scrubbers en la flota global de portacontenedores alcanzó un máximo de 1.385 buques a principios de 2025, equivalente a 12.680.166 TEUs. Esto representa un aumento de 263 unidades o 2.427.799 TEUs con respecto al año anterior. La participación de la flota total equipada con scrubbers es ahora del 41% frente al 36% de hace un año.
Las 10 principales navieras, con excepción de la israelí ZIM, aumentaron su proporción de capacidad equipada con scrubbers en 2024. MSC tiene, con diferencia, el mayor número de portacontenedores equipados con estos dispositivos, con 352 unidades por un total de 3.664.610 TEUs.
Sin embargo, Evergreen consolidó su posición como la línea naviera con mayor compromiso con los scrubbers al añadir casi 229.080 TEUs de capacidad equipada con depuradores en 2024, elevando su porcentaje total del 84% a finales de 2023 a más del 90% por primera vez (con un 91,6%). De este modo, Evergreen cuenta ahora con más buques equipados con scrubbers en número (181) que Maersk (152), a pesar de su tamaño mucho menor. Su compatriota Yang Ming también aumentó la capacidad equipada con depuradores de 125.948 TEUs hasta los 467.998 TEUs durante el año, lo que elevó su proporción de capacidad dotada con estos dispositivos del 48% al 66%.
La exposición de ZIM a los depuradores sigue siendo mínima, con solo nueve buques de 70.176 TEUs, sin cambios con respecto al año pasado y menos del 10% de su capacidad total. Lo que para Alphaliner no es una sorpresa, ya que la línea naviera israelí ha recibido 23 nuevos buques propulsados con GNL desde enero de 2023 por un total de 215.000 TEUs.
Herramienta clave en la transición energética
A pesar del aumento de la propulsión con combustibles alternativos, los scrubbers siguen siendo una herramienta clave en la transición al transporte marítimo con bajas emisiones de carbono. Se estima que el fueloil con alto contenido de azufre junto con un depurador genera entre un 15 y un 20% menos de CO2 que el marine gasoil.
Las líneas navieras también apuestan por una ventaja económica: el diferencial medio entre el IFO 380 de Singapur y el VLSFO fue menor en 2024 que en 2023, pero a US$125/tonelada (2023: US$155/tonelada) todavía ofrecía un excelente arbitraje a las líneas navieras. Esta ganancia se vio amplificada por las distancias adicionales de la navegación alrededor del Cabo de Buena Esperanza durante la crisis.
En general, los precios del combustible se mantuvieron estables o a la baja en 2024. El IFO 380 de Róterdam subió un 1% interanual, mientras que el VLSFO bajó un 4%. Los precios del MGO cayeron casi un 13%, el segundo año consecutivo de fuertes descensos.
Se espera que los precios del combustible vuelvan a caer en 2025, un pronóstico que probablemente se verá reforzado por el reciente acuerdo de alto el fuego en el Mar Rojo, así como por las noticias de los recientes aumentos de la oferta de la OPEP.
Cabe acotar que a diferencia de otros acontecimientos geopolíticos recientes que afectaron al transporte marítimo, la crisis del Mar Rojo tuvo un impacto relativamente pequeño en los precios del petróleo y el GNL.
Fuente: Mundo Marìtimo.