La venta de camarones a China de enero a mayo de este año, en comparación con el mismo período de 2022, creció en un 43 %, según las cifras de la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA). El año pasado se enviaron más de 486,9 millones de libras y en 2023 suman 698,1 millones de libras del crustáceo. No obstante, la facturación aumentó apenas un 20 %

Aunque los volúmenes aumentan, el precio del alimento se mantiene caído. El presidente de la CNA, José Antonio Camposano, dijo a Diario EXPRESO que la causa es el deterioro del consumo en el país asiático y otros países, lo que afecta a la cadena productiva, la cual no logra cubrir sus costos de producción. En los últimos 15 meses, el costo ha disminuido 0,70 dólares por libra; esto se traduce, reitera el gremio, en una pérdida en la liquidez de 1.000 millones de dólares, en el primer semestre de 2023.

La participación de China aumentó, pasó de 53 % a 64 %, pero con pocos resultados positivos en los ingresos de divisas.

En Estados Unidos, la situación es peor. Este mercado que tiene un 15 % de participación tuvo una caída en 7 % en las libras del camarón vendido a ese destino, pasó de 179 millones a 167,3 millones de libras. Sus ingresos también bajaron un 18 %.

En Europa los principales países también están comprando menos, por efecto de la inflación que viven esos países como son España (-17 %), Italia (-13 %), Francia (-24 %) y Portugal (-36 %).

La consecuencia de esto es que en los cinco primeros meses del 2023 se ha logrado una venta total de 2.707,4 millones de dólares. Aquí la variación es de tan solo 1 %, cuando en el año pasado en relación al 2021 el crecimiento fue de 62 %. Ni siquiera en el 2020, cuando se enfrentaba la crisis de la pandemia de la COVID-19, la variación en dólares fue tan baja. En ese año creció en un 11 % en comparación con enero a mayo de 2019. La situación del sector no pinta positivo, a este problema los exportadores deben sumar los altos costos que le deja la inseguridad.