El puerto de Barcelona multiplica por cinco el volumen de contenedores reefer en una década

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El puerto de Barcelona está presente de Fruit Logistica de Berlín, con una amplia representación comercial, encabezada por la subdirectora general de Comercial y Marketing, Carla Salvadó; el Head of Automotive, Roro, SSS & Bulk Division, Lluís París, y el Head of Container Division, Carles Mayol, entre otros.

Los contenedores refrigerados suponen el 8% del tráfico total de contenedores del puerto de Barcelona gracias a la apuesta de toda la comunidad portuaria por este segmento.

El tráfico de contenedores refrigerados ha sido uno de los segmentos que más ha crecido los últimos años en el puerto de Barcelona, gracias a una apuesta decidida de toda la comunidad portuaria por la logística de contenedores a temperatura controlada. Las terminales del puerto de Barcelona movieron en 2021 un total de 278.000 teus refrigerados, cinco veces más que diez años antes, en el 2011, cuando este tráfico fue de 56.000 teus.

Este incremento supone un crecimiento anual promedio superior al 17% en un segmento que a nivel global ha experimentado, de media, un aumento del 2,6% anual durante la última década y que con la pandemia solo se redujo un 0,4%, según datos del informe Drewry Reefer Trends & Stats 2021/2022. Este importante crecimiento ha supuesto que la cuota de contenedores reefer sobre el total de teus- en el puerto de Barcelona pase del 2,8% en 2011 al 8% en 2021.

Son cifras que consolidan el puerto de Barcelona como hub euromediterráneo para los productos alimentarios. Todo ello construido sobre la excelente ubicación del puerto para este tipo de mercancías, con conexiones directas con los principales puertos del Mediterráneo Occidental y acceso a un amplio hinterland, con conexiones viarias y ferroviarias regulares a las principales zonas agrícolas y ganaderas de Catalunya, Aragón y Navarra, así como a mercados mayoristas del calibre de Mercabarna, Mercazaragoza, Mercamadrid o Saint Charles, en el Sur de Francia. En su conjunto, el puerto de Barcelona es el centro neurálgico de un mercado de 400 millones de personas accesibles a menos de 48 horas de trayecto.

Infraestructuras al servicio del tráfico reefer

La ubicación, sin embargo, no lo es todo. El puerto de Barcelona sigue poniendo en marcha nuevas infraestructuras y servicios para los productos agroalimentarios. En el ámbito del transporte refrigerado, las terminales de contenedores -BEST, perteneciente al grupo Hutchison, y APM Terminals Barcelona-, así como la terminal multipropósito Port Nou, superan actualmente las 3.500 conexiones reefer permanentes, lo que sitúa al puerto barcelonés como líder del Mediterráneo para este tipo de tráfico. La terminal BEST incorporará nueva infraestructura para contenedores refrigerados, lo que conllevará que el Port de Barcelona pase a ofrecer 4.000 conexiones reefer en un plazo de dos años.

Del mismo modo, los operadores logísticos están incrementando sus servicios para este segmento de tráfico. Tras el éxito del servicio ferroviario exclusivo para carga refrigerada Canal Frío, puesto en marcha en 2016 y que conecta diariamente Zaragoza y Barcelona, se ha puesto en marcha un servicio ferroviario refrigerado con la Terminal Intermodal Monzón, en Huesca, que ofrece 4 frecuencias semanales, y más recientemente un servicio similar con Noain (Pamplona).

La optimización de las infraestructuras ha ido acompañada de mejoras operativas en el Punto de Inspección Fronterizo y de aplicaciones para agilizar al máximo el paso de productos frescos y garantizar su conservación y trazabilidad.

Apuesta de las navieras

En el ámbito marítimo, el puerto de Barcelona ofrece las mejores infraestructuras, servicios y conectividad para el tráfico de contenedores del sur de Europa y del Mediterráneo. Actualmente, cerca de 100 líneas regulares conectan Barcelona con 850 puertos en todo el mundo. Destaca, por su oferta y transit time, la conectividad con los principales mercados americanos y asiáticos. Estos servicios interoceánicos se completan en el Mediterráneo con los servicios diarios de short sea shipping que enlazan con el norte de África y resto de Europa, creando una completa oferta intermodal y unos servicios logísticos fiables y competitivos.

Un ejemplo de estas conexiones es la nueva línea regular entre el puerto de Barcelona y TangerMed, en Marruecos, especialmente orientada al transporte de plataformas a temperatura controlada, en este caso en modalidad ro-ro y que entró en servicio el pasado noviembre. La naviera que opera la nueva línea, La Méridionale, escogió el puerto de Barcelona por su proximidad al mercado francés y del norte de Europa y por sus servicios intermodales. Enfocado al transporte de mercancías a temperatura controlada, el buque que opera la nueva línea dispone de 45 conexiones reefer a bordo, facilitando las importaciones de productos hortofrutícolas de origen marroquí.

Este no es un caso aislado. Las principales navieras de todo el mundo también están apostando por aumentar las infraestructuras y servicios para contenedores. Un ejemplo son los buques de la serie Gülsün, de la compañía Mediterranean Shipping Company, que escalan regularmente en Barcelona en su ruta entre Europa y Asia. Estas naves, que cuentan con una capacidad de 23.756 teus y se encuentran entre los mayores del mundo, disponen de 2.000 conexiones reefer a bordo.

La combinación de infraestructuras y servicios logísticos y de transporte específicos para los contenedores a temperatura controlada y unas líneas regulares altamente competitivas, tanto en tiempos de tránsito y como en costes, con los principales mercados emisores y receptores -como los americanos y asiáticos- sitúan a Barcelona como el mejor hub logístico para el sector hortofrutícola y de productos refrigerados.

 

 

Fuente: Diario EL CANAL

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