Maersk anunció la firma de un acuerdo a largo plazo con la empresa china de energías limpias Goldwind, la que se compromete a suministrar a la línea naviera 500.000 toneladas anuales de metanol «verde» a partir de 2026, reporta Alphaliner. Los volúmenes acordados comprenderán una mezcla de bioetanol verde y de e-metanol , este último producido mediante energía eólica en una planta que aún está por construirse en el noreste de China.
Maersk destacó que este acuerdo desempeñará un papel crucial en la reducción significativa del riesgo en las fases iniciales de su transición hacia el “cero neto” en los próximos años. Hasta el momento, la línea naviera había optado exclusivamente por el metanol como combustible de carbono cero. La situación funcionará como un «puente» estratégico hasta 2030, fecha en la que se anticipa el desarrollo de un mercado competitivo de metanol ecológico.
“Laura Maersk” y el futuro
A principios de este año, Maersk recibió su primer buque propulsado por metanol, el «Laura Maersk», diseñado en parte como prueba de concepto. La nave, de 2.100 TEUs, ya inició operaciones en la ruta Alemania-Suecia-Dinamarca.
Además, Maersk planea integrar a su flota 35 buques propulsados por metanol entre 2024 y 2027. Estos incluyen doce naves de 16.000 TEUs, seis de 17.000 TEUs de Hyundai y seis de 9.000 TEUs de YZJ. Además, se espera que la línea naviera realice conversiones en once buques de 15.300 TEUs, todos pertenecientes a la clase H construida entre 2017 y 2019.
El primero de estos buques, el «Ane Maersk» de 16.000 TEUs, está programado para su entrega en febrero.
La industria busca un cambio
Este paso hacia la adopción de combustibles más sostenibles ha sido seguido por otros actores del sector. Algunos optan por el metanol como única alternativa de combustible ecológico, mientras que otros consideran tanto el metanol como el gas natural licuado (GNL) como vías hacia la descarbonización.
Sin embargo, recientemente, el aumento de los precios de los nuevos buques y la reducción de la diferencia de costes entre los buques de metanol y los de GNL, junto con la preocupación por la disponibilidad de suficiente metanol ecológico, han llevado a algunas navieras a reevaluar sus opciones.
Fuente: Mundo Marítimo